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Chef

GANDHYYEROVI

Instructor en Escuela CAPEX

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En las últimas décadas las tradiciones ecuatorianas se han ido disolviendo en conjunto con la fuente de nuestras costumbres. Debido a la transculturización y la mimetización con costumbres y tradiciones extranjeras, poco a poco se ha ido perdiendo nuestra identidad, y eso también cuenta para la parte gastronómica.

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Parte de las bebidas ancestrales se han visto comprometidas, pero en algunos hogares todavía se conserva una tradición ancestral que se remonta hace más de 5000 años. Cuando los sacerdotes Incas todavía utilizaban los templos, que hoy consideramos ruinas, las bebidas a partir del cacao se utilizaban para invocar la riqueza y la abundancia en sus rituales sagrados. 

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En la actualidad muchos hogares aún comparten la tradición de tomar una deliciosa taza de chocolate caliente, acompañado de Pan de Pascua. Es seguro que la gran mayoría conserva estas costumbres sin recordar su verdadero origen, pero no hay de que avergonzarse pues más bien es un hecho de alegría nacional el mantener estas tradiciones ancestrales en fechas tan especiales.


Aunque el contexto histórico en el que se desenvuelve esta mística bebida es muy interesante, su elaboración debe seguir varios pasos y técnicas de preparación para obtener el mejor sabor y poder disfrutar de la completa experiencia ancestral. 

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Es muy recomendable elaborar bebidas de chocolate no solo a partir de cocoa o cacao en Polvo, sino también utilizar chocolates semiamargos como ingrediente principal. Utilizar cocoa es bastante conveniente debido a la simplicidad de su elaboración, pero integrar chocolate a la bebida aportará propiedades de sabor y aroma que nos permitan conectar más con la riqueza y biodiversidad frutal y floral del Ecuador. 


Si bien podemos sentirnos tentados a comprar un chocolate de marcas conocidas, elegir una marca emprendedora nacional también es un gesto de solidaridad, fortaleza y fraternidad con nuestros emprendedores ecuatorianos. Chocolates con al menos 60% de cacao son buenas opciones para la elaboración de estas bebidas sin necesidad de agregar más azúcar a su preparación.

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Para los paladares más exigentes es muy buena opción chocolates superiores al 70% de cacao, de preferencia si es elaborado a partir de cacao nacional o fino de aroma. Puedo asegurar que su paladar agradecerá esa explosión de sabores en boca. Seguramente algunos pensarán que es muy amargo, si es el caso, podrían agregar menos de una cucharadita de azúcar de coco o azúcar morena para evitar cambiar los sabores de su bebida. Todo se calienta a fuego muy bajo durante al menos 30 minutos junto con una buena cantidad de leche entera. Es importante agregar el chocolate en la leche caliente y no al revés para evitar quemar el chocolate.

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Una bebida intemporal que puede disfrutarse de día, de tarde o de noche. Esta es una opción ideal para que activar nuestros disparadores de serotonina y compartir esa felicidad cuando más se necesita.

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